sábado, 28 de abril de 2012

LORCA: PESADILLA SIN RESPUESTAS


Porque las rosas buscan en la frente 
un duro paisaje de hueso 
y las manos del hombre no tienen más sentido 
que imitar a las raíces bajo tierra…
(Gacela de la huida. Federico García Lorca)

Aquel dia era miercoles 11 de mayo. Un dia como cualquier otro. Incluso un poco mas caluroso de lo habitual por estas tierras. En torno a las cinco de la tarde la tierra tembló por primera vez en Lorca con una magnitud de 4.5 en la escala de Rigther. Y apenas dos horas después, en torno a las siete menos diez, la sacudida fue muchisimo mayor y mas devastadora. La magnitud alcalzó los 5.1 grados. El caos, la destruccion, la desolacion y la muerte se pasearon por la ciudad a lomos de los caballos apocalipticos que anuncian el fin del mundo. Los seismos dejaban tras de si nueve muertos, mas de trescientos heridos y miles de personas sin hogar. La ciudad habia quedado arrasada.






Mas tarde dirian los expertos que fueron terremotos de nivel medio o moderado pero que la proximidad epicentral a la superficie y la ubicación del nucleo urbano sobre el eje de la falla asi como las particularidades del terreno formaron una combinacion explosiva puesto que la intensidad alcanzó el grado VII. El máximo en la escala de la Red Sismica internacional.

Han quedado a fuego, en mi corazon y mi memoria, las imágenes que presencié en Lorca cuando llegué a la ciudad en las primeras horas de la noche. Gentes deambulando como fantasmas por las calles. Perdidas y sin rumbo. Personas cobijadas bajo mantas y todo tipo de ropas ocupando todos los jardines y espacios al aire libre que hay en esta hermosa ciudad. Todos los edificios, que se mantenian en pie, apagados como espectros fantasmales de lo que horas antes habia sido vida intensa. El sonido, estremecedor, constante de sirenas. Los motores de los helicópteros aterrizando o despegando. Personas andando perdidas sin rumbo, como ausentes, focos encendidos, militares de la UME con vehiculos de todo tipo, lagrimas en los rostros y gentes que, sin conocerse de nada, se abrazaban para darse el calor de vida tan necesario en aquellos momentos de desolacion y muerte.


Conforme iba amaneciendo sobre Lorca, una mañana grisacea y plomiza, la luz del dia iluminaba un paisaje desolador. Donde hubo vida y alegria, unas horas antes, ahora solo había dolor y sufrimiento. Destruccion. El caos imperaba por todos los rincones de la ciudad y en cualquier calle, plaza o avenida tenias que sortear cascotes y restos que ocupaban la calzada. Incluso de sus impresionantes monumentos, que la convirtieron un buen dia, en ciudad emblematica del barroco español, se habian desprendido trozos de gloria e historia dejando destrozos que ni guerras o revoluciones fueron capaces de hacer siglos antes. La propia fortaleza medieval, santo y seña de la ciudad milenaria, se habia resquebrajado y sus torres amenazaban con venirse al suelo en cualquier momento. Mientras, en nueve familias de Lorca, se velaban los restos mortales de los inocentes que habian perecido en la sacudida inmisericorde de la tierra. Nueve muertos. Nueve historias distintas y diferentes. Nueve formas de morir, cada una sin parecerse a la otra, pero nueve vidas segadas de raiz una luminosa tarde de la primavera cuando, minutos antes del seismo, gozaban de la vida plena. Silencio, desolacion y muerte. Lorca está de luto.





HA PASADO UN AÑO
Lorca no ha olvidado ni podrá olvidar, por mucho tiempo que pase aquella trágica tarde de mayo. Ahora se cumple el primer año. ¿Se ha hecho algo? ¿Se ha solucionado algo? ¿Cómo esta la situacion actual en la ciudad?

Son muchas interrogantes para contestar en este apunte que ofrezco en mi blog. Por eso me voy a ceñir a los datos, en los que estamos trabajando, para plasmar de la manera mas fidedigna y real lo que esta sucediendo hoy en la conocida como “Ciudad del Sol” pues, cuando hablas con gentes de fuera de nuestra Comunidad, se piensan que todo está arreglado y que Lorca ha vuelto a recobrar la normalidad. Nada mas lejos de la realidad pues la ciudad sigue con las heridas abiertas, su economia no despega y lo que es peor, las gentes, las maravillosas gentes de este rincon de España, ya les han salido surcos de dolor en sus almas pues ven, impotentes, como las administraciones se pelean entre ellas, los politicos se lanzan continuamente reproches y la pura y dura realidad del dia a dia es que Lorca sigue estancada en el fango del olvido, no quisiera decir “desidia”, de los que no han hecho todo cuanto deberían haber hecho para que esta poblacion, orgullo de Murcia, hubiera salido ya de la pesadilla donde la incompetencia y la lucha politica le ha tenido inmersa durante todo un año.





Los numeros hablan por si solos. A dia de hoy, mas de ocho mil personas no han podido volver a sus hogares. Esto les ha obligado a alquilar otra vivienda, alojarse con la familia, o buscar ayudas en segundas residencias de amigos que les han prestado su techo. Sumen a todo esto aquellas familias que tienen que seguir pagando la hipoteca, los bancos no tienen culpa de los terremotos ni tienen culpa de nada como siempre, y la hipoteca sigue llegando todos los meses y el alquiler del cobijo temporal tambien aparece en las mismas fechas. El agua, la basura, la luz, el teléfono... hay que seguir pagando incluso cuando de aquel edificio solo queda un solar o es una construcción fantasmal. Pero, los pagos, llegan fijos a primeros de mes. ¿Y las ayudas? Esas "ni están ni se les espera" 


Las zonas mas dannificadas son el “Barrio de la Viña”, barrio de gentes trabajadoras que, en muchos casos, consiguieron sus pisos con enorme sacrificio y muchos de ellos acudiendo a la “vendimia francesa” de temporeros. De ahí que su nombre, la Viña, recuerde los origenes obreros  de emigrantes lorquinos trabajando en tierra extraña. Hoy, a aquellos pioneros del barrio, se han sumado una serie de parejas jóvenes y menos jóvenes que gracias a las modernas construcciones realizadas en la zona, compraron alli su casa para formar una familia. Parejas, familias, que arrastran y tienen por delante mas de treinta o cuarenta años de dura hipoteca. Todo o casi todo destruido.


San Fernando: Una de las zonas mas deprimidas de Lorca. Con un altisimo porcentaje de familias en riesgo de exclusion social. De los nueve bloques de viviendas sociales, tres han sido derribados y los otros seis restantes estan en un estado de ruina inminente. Hay pisos, en la actualidad, saqueados u ocupados pues sus residentes no pueden pagar una segunda residencia. El caos es total y los habitantes de esos bloques corren un serio peligro de perecer en cualquier momento bajo un amasijo de cascotes. Son los mas humildes, los mas pobres, los olvidados de la sociedad en muchos casos con un alto indice de exclusión social. Parecen haberlos abandonado a su suerte.


Alfonso X: Barrio pequeño y humilde. Eran aquellas conocidas como “Casas baratas” del tardo franquismo. Muchisimas de ellas derribadas y otras tantas en situacion indefinida y sin poder habitarse dado el estado ruinoso que presentan. Sus habitantes son, en su mayoria, personas mayores sin recursos, jubilados, pensionistas y enfermos que necesitan constantemente las ayudas sociales. Muchos de ellos, pese a los informes tecnicos, siguen viviendo en esas casas pues no tienen donde ir ni posibilidad de pagar un alquiler. Esperan pacientes que alguien, algun dia, solucione sus problemas. Una media de edad estimada en los sesenta y ocho años. Pensiones de cuatrocientos euros, en los casos mejores, y viviendo de asistencias sociales que, ahora, con los recortes se ven seriamente en peligro.


Aparte de estos tres barrios, los mas afectados por la fuerza telúrica, hay otras zonas dañadas a dia de hoy, un año despues, en la que tambien se han derribado eficios pero en los que la incidencia ha sido menor. Son zonas en pleno casco histórico, en la Avenida Juan Carlos I, en el barrio de San Diego o un numero importante e indeterminado de viviendas unifamiliares repartidas por la extensa huerta lorquina y en especial en la pedanía de Río.




Esta es solo una pequeña fotografía, a vuelo de pájaro y sin profundizar, de la cruda realidad lorquina un año despues de los seismos. Un panorama desolador que ha llevado a muchas familias a situaciones extremadamente dificiles y complejas ya que, la mayoría, con los edificios derribados han tenido y tienen que seguir pagando la hipoteca, dichosos bancos,  no pueden reconstruir, no han recibido las prometidas ayudas y muchas, incluso, no tienen recursos para pagar ningun tipo de piso o un nuevo alquiler. En algunos casos, mas doloroso, en el dia a dia tienen que recurrir a unas mas que desbordadas Caritas parroquiales que se ven impotentes para poder paliar tanto dolor  como hay entre los vecinos.


En lo que va de año mil doscientas sesenta y cuatro viviendas han sido demolidas al sufrir serios daños en sus estructuras. Aproximadamente, en la actualidad, unos quinientos edificios continuan en obras sin que hayan podido volver a ellos sus moradores. Sumando a todos esto, logicamente, las llamadas “obras menores” que  son imposibles de contabilizar pues es muy rara la casa, especialmente bajos, que no siguen en obras despues de tantos meses.

Frente a todo este caos unicamente se han instalado, a dia de hoy, trece viviendas modulares para dannificados que en su momento, hace unos meses, cedió Cruz Roja Española.
Como decía anteriormente, este comentario, es unicamente una pequeña aproximacion a la cruda realidad de Lorca un año despues de aquel trágico once de mayo del año dos mil once. Una pequeña, ínfima, fotografía de aproximación.

 Seguiré, es mi intención, hablandoles del comercio, la agricultura y la economia que, logicamente, se han visto seriamente dañadas y con consecuencias imprevisibles debido a que numerosos comercios han tenido que cerrar sus puertas ya que mas de setecientos, según las cifras que baraja la patronal lorquina, CECLOR, se vieron seriamente dañados por los terremotos y a dia de hoy, de esos, mas del veinte por ciento no han podido reiniciar su actividad.

Mientras todo esto ocurre, en este hermoso rincon de España, los politicos de uno y otro signo buscan, en el contrario, el culpable de semejantes desatinos. El tristemente celebre “y tu mas” se instaló un mal día tambien en Lorca y se ha perdido muchisimo tiempo, demasiado, en arrojarse las miserias politicas unos a otros. Pero eso si en las dos campañas electorales que hemos vivido en este año, tras los seismos, las autonomicas y municipales mas las generales, todos los lideres, todos sin excepcion, han querido “manchar” sus caros zapatos de marca pisando solares y poniendo cara ciscunspecta ante los medios de comunicación que inmortalizaron su presencia en la ciudad consolando ancianos, acariciando niños o contemplando, con la máscara del drama, en sus caras, las ruinas de lo que hace tan solo unos meses era vida.





No nos olvidemos de esta ciudad. Nos necesitan sus gentes mas que nunca. No nos olvidemos de Lorca y los lorquinos. No pensemos que la normalidad ha vuelto. No miremos para otro lado. Es una labor de todos y entre todos tenemos que devolver el esplendor a una ciudad que fue, en su larga y gloriosa historia, protagonista indudable de momentos de esplendor. Lorca nos necesita igual que el primer dia despues de las durisimas sacudidas de la tiera. Y, que a nadie se le olvide , un año después, porque LORCA SOMOS TODOS.


2 comentarios:

  1. María Jesús Quińonero29 de abril de 2012, 10:39

    Así es la realidad de nuestra historia reciente. Se va acercando el primer aniversario y no puedo evitar acordarme del miedo que pasamos y la tristeza que aún hoy me causa acordarme de aquel día 11. Y por primera vez entendí el significado de la palabra deambular. Subía a Lorca desde casa mis padres, con un par de macutos, e intentaba subir al piso para recuperar algunas cosas....todo el mundo hacía lo mismo, recuerdo a la gente con bolsas de Eroski, Mercadona y con maletas de mano, en general. No olvidéis que todos salimos de casa con lo puesto y necesitábamos lo más imprescindible, como unas simples mudas. Fueron segundos de un instante y meses posteriores que no podremos olvidar nunca. Otra historia que hará historia en la vida de los lor quinos.

    ResponderEliminar
  2. Lo he leido y releído y solo me sale la palabra "abrazo" para expresar mi gratitud hacia tu permanente recuerdo de nuestra Lorca y sus gentes , abrazo como el que nos dimos en presencia de Amor , de nuestra Amor en la zona de mando , abrazo como el que quisiera dar a todos los que aun no tienen solucionado - como yo - su vuelta a empezar, abrazo como el que quisiera dar a los que tienen la potestad de solucionar y no lo hacen o lo retardan, a estos el abrazo sería "del oso". Gracias "hermanico".

    ResponderEliminar